domingo, 20 de enero de 2013

IN YOUR EYES

- Autora: Brownie Patterson

- Twitter: @MEPP19


- Tipo: SHINee y EXO-K, 2min (Minho x Taemin), OnKey (Onew x Key), JongKai (Jonghyun x Kai), +18, yaoi, serial



CAPÍTULO 5



-Yo...yo...lo siento, Taemin.-me senté a su lado sin decir nada, y continuó hablando.- No creí que fuese capaz de tanto...te dije que mientras yo estuviera a tu lado, no pasaría nada, y no he cumplido.
-No te tortures -interrumpí, se me estaba rompiendo el alma de verlo así- estoy entero, ¿no? Pues ya está.

Las lágrimas comenzaron a caer, formando un río en sus mejillas. Retuve las lágrimas y le ayudé a levantarse.

-Vamos, mañana hablaremos más calmados.

Subimos las escaleras en silencio,  le di un beso en la mejilla y me di la vuelta con intención de entrar en casa, pero me retuvo agarrándome del brazo. Me giré y me abrazó. Con tanta fuerza que creí que me ahogaba. Los ríos de sus mejillas se convirtieron en mares, se estaba ahogando en un llanto desconsolado.

-Lo siento, lo siento, lo siento -repetía una y otra vez sin soltarme.

De nuevo retuve mis lágrimas, pero no aguantaría demasiado, me separé como pude de ese abrazo que estaba terminando con mi respiración.

-Buenas noches, descansa.-le dediqué una risa finjida y entré corriendo en casa.

Nada más cerrar la puerta las lágrimas comenzaron a deslizarse por mi rostro, me dejé caer de rodillas mientras el llanto aumentaba. Desperté a Key y a Onew, que aparecieron de inmediato. Mantuve silencio, no tenía palabras, y aunque las tuviese, no tenía energía para hablar. Onew me levantó y me llevó hasta el sofá, mientras Key me preparaba una tila.

-¿Estás bien?

Asentí con la cabeza, pues como ya he dicho, no tenía energía para soltar palabras. Si intentaba hablar, la voz me salía ahogada.

-Mentiroso.-me dedicó una de sus enormes sonrisas y me abrazó.

La verdad es que logró calmarme. Onew era una de esas personas con las que me resultaba realmente fácil relajarme. Siempre me escuchaba, siempre me apoyaba, y siempre sabía como tratarme cuando me encontraba en un pésimo estado de ánimo.
Kibum se sentó a mi otro lado y apoyó la taza con la tila en la mesa.

-Quema mucho, mejor espera un rato.

Se quedó mirando para mí, le brillaban los ojos y tenía una expresión de tristeza.

-¿Qué ocurre?-conseguí pronunciar, despues de que las lágrimas cesaran.
-¿A mí? Nada, estaba preocupado por tí. ¿Cómo estás?

Sabía que mentía. La verdad es que últimamente notaba a Key algo angustiado, pero no me había parado a preguntarle hasta hoy. Decidí no insistir, bastante mal estaban las cosas.

-Yo bien, tomaré la tila y me iré a dormir. Perdón por despertaros.

Cogí la taza y la llevé a mi habitación. Me senté en la cama con las rodillas en alto y bebí la infusión con rapidez. Posé la taza en mi mesilla de noche y rodeé las rodillas con los brazos. Escondí la cabeza y me quedé así durante una media hora. Finalmente me decidí por intentar dormir, y digo intentar porque no pegué ojo en toda la noche.

--

Eran ya las 5 y media de la madrugada y yo seguía despierto. Estaba sentado sobre la manta mirando hacia el techo.

-¿Pero todavía estás despierto? -me sobresalté y me cegué cuando se encendió la luz. Cuando logré abrir los ojos ahí estaba Onew, frotándose el ojo derecho con el puño y vostezando.
-¿Estás loco? Casi me da un infarto.
-Sentado en cama a las 5 y media de la mañana, ¿y el loco soy yo?

Le dediqué una mirada asesina, se acercó y se sentó a mi lado.

-¿Cómo te has despertado tan temprano?
-No me encuentro demasiado bien, así que iba a ir a dar un paseo mañanero para despejarme.
-¿No ves como estás loco?-ambos reímos.
-Taemin, deja de darle vueltas a la cabeza, deja de pensar en lo que pasó. Estás bien, y eso es lo que importa.

No dije nada, y dejé que continuase hablando.
 -Y te agradezco que no la hayas pagado con Minho...-me sorprendió que me dijese eso. Él no tenía una relación de mucha confianza con Minho, al menos que yo supiese.

 ¿Quien era realmente Minho? Un millón de preguntas pasaban por mi cabeza. ¿Por qué todos se llevaban tan bien con él desde el primer día? ¿Por qué mostraron tanta confianza cuando nos lo presentaron?

-Onew, ¿qué me ocultais?-se atragantó con su propia saliva.
-No sé que quieres decir, ¿qué te íbamos a ocultar?
-¿De qué conoces a Minho?
-De que es nuestro vecino.
-Mientes muy mal.
-Mira...las dudas que tengas, no es a mí a quien debes preguntárselas.

Jugó un poco revoloteándome el pelo y se levantó.

-Vístete anda, ¿no tenemos que ir a comisaría? Te llevo antes de que se despierte Key, que últimamente no para quieto y no descansa nada.

Asentí. Me duché y me vestí con bastante rapidez. Aunque la cabeza seguía dándome vueltas. ¿No habían pasado demasiadas cosas en muy poco tiempo? Hacía un par de semanas mi vida estaba tranquila, y pensar en todo lo que había ocurrido...parecía irreal.
Salimos de casa y cerramos la puerta muy sigilisomante. Pues eran poco más de las 6 de la mañana, no eran horas de hacer ruido. Bajamos las escaleras y montamos en el coche. Llegamos bastante rápido a la comisaría, Key ya había hablado el día anterior con los policías, así que no nos llevó mucho tiempo.

--

-¿Vamos a tomar algo? Hace mucho que no hablamos tú y yo solos, y no estaría de más en estos momentos, ¿no?

Asentí, Onew tenía razón. Aunque viviésemos juntos llevábamos un tiempo algo distanciados, y las conversaciones que solíamos tener antes eran incomparables. Él siempre había sido como mi consejero, como un hermano mayor, siempre había estado ahí.
Fuimos a una cafetería que estaba justo en frente de nosotros, tenía una buena apariencia y no había mucha gente. Entramos y agradecimos la calefacción, fuimos a una mesa que estaba algo escondida y pedimos un café con leche cada uno.

-El mío doble, por favor.-dijo Onew. La dulce camarera que nos atendía asentió y se fue.
-Bueno, supongo que no vas a aclarar mis dudas,-comencé a entablar la conversación-así que, ¿hay algo de lo que quieras hablar?
-Hay tanto de lo que hablar, Taemin.-me estaba asustando, tenía una expresión preocupada, Onew no era lo mismo sin esa dulce sonrisa que solía lucir.
-Verás,-continuó hablando-¿no has notado a Key un poco raro ultimamente?
-Ahora que lo dices ultimamente lo noto triste. ¿Ocurrió algo? ¿Habeis discutido?
-No, no es eso. El otro día llegué a casa y escuché que estaba hablando por teléfono. Asomé la cabeza y le vi algo preocupado, no pude entender lo que decía, pero cuando colgó pude notar su rostro totalmente roto. Le pregunté que qué ocurría, que por qué estaba así, pero él insistió en que no pasaba nada. Y desde ese día está cabizbajo, triste, ausente, no lo sé, pero estoy muy preocupado.

Permanecí callado mientras intentaba pensar en qué le podía haber ocurrido a Key. Quizás había ocurrido algún problema familiar y por eso estaba así. ¿Pero por qué no querría contárnoslo? Aunque sí que es cierto que Kibum era muy reservado para eso, siempre que le ocurría algo evitaba contárnoslo.

-Ayúdame, Taemin -prosiguió Jinki- ayúdame a ayudarle. Habla con él, intenta que te cuente algo. Necesito saber qué le pasa, me destroza verlo así...- no pudo continuar hablando, su voz temblaba.
-No te preocupes, haré lo que pueda.

Dijo un gracias en voz baja y se bebió lo que quedaba de café de un sorbo.

-Cambiando de tema, -su voz comenzaba a recuperarse- ¿has hablado con Minho?
-No, tenía pensado hablar con él hoy por la tarde pero no sé que hacer.
-Como te dije por la noche, está destrozado.
-Como te dije por la noche, -repetí- quiero saber qué me ocultais.
-Insisto en que yo no tengo nada que contarte, de verdad.
-Bueno, ¿nos vamos? -fingí una sonrisa. Fingí no estar molesto.

Nos levantamos, fui a pagar la cuenta pero Onew se me adelantó.

-No me gusta que me inviten.
-No me gusta que me guarden rencor. -su sonrisa volvió a aparecer.

Realmente no le guardaba rencor, tenía razón en que no era él el que debía de resolver mis dudas.
Salimos de la cafetería, subimos al coche y volvimos a casa. Subimos las escaleras y abrimos la puerta sigilosamente por si Key seguia durmiendo. Aunque ya eran las 12, era evidente que ese culo inquieto ya estaría en pie.

-¿Por qué no me habeis despertado?
-Necesitabas descansar, ultimamente no paras quieto. -le dijo Onew. Yo hice como si estuviera a otras cosas, pero atendí perfectamente a la conversación.
-Estoy bien, ¿qué quereis de comer?
-Hoy cocino yo. No está bien que hagas tú todas las tareas de la casa, Taemin me ayudará.
-¿Ah sí? -me incorporé a la conversación- Digo..¡ah, sí! -yo no tenía ni idea de cocina, pero bueno, todo fuese por Kibum.
-¿Se puede saber que os pasa? Estais raros.
-Solo estamos amables.-respondí.
-Pues eso, raros.-dijo con una expresión burlesca.

Corrí hacia él y comenzó una, ya habitual, guerra de cojines.

--

RingDingDong...

-Ag, estúpido móvil. -susurré.

Me había quedado dormido despues de comer el pollo frito de Onew, menudo cocinero...
En la pantalla del móvil aparecía su nombre, contesté sin dudarlo dado que yo ya tenía en mente hablar con él.

-Dime.
-¿Podemos hablar?
-Claro, ¿me paso por tu casa?
-Sí, por favor.

Colgué y me levanté. Me miré al espejo y pude ver el aspecto que tenía, parecía que había pasado una avalancha de animales salvajes por encima de mí. Pasé el peine por mi cabello hasta quedar con un aspecto algo decente, pero las ojeras no me las quitaba nadie.
Reparé en la casa, llamé a Onew y a Key varias veces pero no obtuve respuesta. Y claro, ¿como la iba a obtener? Si estaban los dos dormidos, abrazados, en el sofá. Hacían una pareja estupenda, que envidia me daban.
Salí de casa y cerré la puerta muy despacio para no despertarles. La puerta de Minho ya estaba abierta, entré y le di un empujoncito para que se cerrase.
Él estaba sentado en la cocina. Y encima de la mesa había unas 6 tazas, 7 si contamos la que tenía éste en su mano. Se veía que era tan adicto al café como yo, o incluso más. Me senté en frente de él.

-Y bien, ¿qué me querías decir?
-Donghae me ha llamado, esta noche coge un vuelo a Estados Unidos.
-¿Y como sabes que es cierto? ¿Cómo sabes que no te está engañando para...
-Es cierto. -cortó mi pregunta, no me dejó continuar- Es tontería que me engañe, le has puesto una orden de alejamiento, sabe que no le conviene volver a aparecer. Y no es tan tonto como para hacerlo.
-Bueno, pues mejor.
-Lo siento. -bajó la cabeza, y su voz temblaba demasiado- Lo siento, lo siento...de verdad que yo no quería causarte estos problemas. Yo no quería que pasases por esto, y es por mi culpa. Yo quería protegerte, yo...
-No pasa nada. -busqué su mano y entrelacé mis dedos con los suyos- Te quiero, por mucho que duela, te quiero.

Las lágrimas amenazaban con salir de mis ojos pero las retuve, igual que noté que Minho retenía las suyas. Me miró y abrió la boca para decir algo, pero intervine.

-Quiero saber qué me ocultas.

Su expresión cambió totalmente. Miró para abajo y se mordió el labio. Intentó aparentar que no sabía a qué me refería, aunque ni yo lo sabía.

-No sé qué quieres decir.
-Pues eso, que quiero saber que me ocultas. Quiero saber que me ocultais todos. ¿Quien eres? ¿De que los conocías a ellos? ¿Por qué decidiste realmente mudarte aquí? ¿Por qué apareciste en mi vida? Eso es lo que quiero saber.
-Si pudieses recordar...-se dijo para sí, pero pude escucharlo perfectamente.
-¿Qué?
-Nada.
-¿Qué has dicho?
-Nada, de verdad. Que no sé de qué me hablas, no te oculto nada.
-¡No me mientas! -alcé la voz y di un golpe en la mesa.- Ya está bien de reírse de mí, ¿no?
-Nadie se ríe de tí, Taemin...
-¡¿Qué es lo que tengo que recordar?! ¡¿Qué!? -me alteré, me hervía la sangre.
-Llama a Key.
-¿Qué?
-Que llames a Key.

Su voz sonaba muy seria. Asentí y saqué mi movil del bolsillo. Nadie contestaba, así que insistí un poco más. Llevaba ya 5 intentos y nadie contestaba. Me iba a dar por vencido cuando mi teléfono comenzó a sonar, era Onew.

-¡Taemin! ¿Se puede saber donde estás? Key se ha desmallado.
-¿¡Cómo!?
-Estoy en el hospi...

No le dejé terminar, colgué y me levanté apurado y se aceleraba mi respiración. Abrí la puerta y una mano me retuvo.

-Eh, ¿qué ha pasado? ¿A dónde vas?
-¡Key se ha desmallado!
-¿Como?
-¿Te crees que lo sé?

Me solté de él y bajé las escaleras corriendo. Salí del portal y podía escuchar su voz llamándome.

-¡Taemin! ¡Espera! Te llevaré en coche, si no vas a tardar demasiado.

Tenía razón, ¿a dónde tenía yo pensado ir andando? El hospital quedaba bastante lejos. Montamos y fuimos lo más rápido posible, dentro de lo permitido.
Aparcamos en la puerta del hospital, salí disparado del coche y mientras corría dentro del hospital llamaba a Onew para que me dijese en qué planta estaban. Subí y me lo encontré sentado en frente de una habitación.

-Está bien, pero están haciéndole más pruebas para asegurarse.
-¡¿Qué ha pasado?!-yo seguía tan alterado como antes, o incluso más.
-No lo sé, nos quedamos dormidos viendo una peli y al despertar Key se levantó diciendo que no se encontraba muy bien e iba a comer algo. En cuanto dio un paso se desplomó y bueno, aquí estamos...

No daba crédito a lo que escuchaba. ¿Desde cuando Key se había encontrado así de mal? Yo era consciente de su pésimo estado de ánimo, ¿pero de salud? No tenía ni idea. Y eso me preocupó todavía más.

--

Pasamos la noche en esas incómodas sillas, sin pegar ojo. Minho y yo no hablamos de nada, tampoco era un buen momento. Pero se portó de maravilla con Onew y conmigo que tan mal lo estábamos pasando, de vez en cuando bajaba a por algunas bebidas.
Amaneció y una enfermera nos dijo que podíamos pasar a ver a Key. Al fin. Entramos Onew y yo, Minho dijo que era mejor que él entrase más tarde y no nos opusimos.

-¡Key! ¿Estás bien? ¿Qué te ha pasado? -pregunté, un poco más calmado tras haber pasado la noche en vela.
-Nada.
-¡¿Nada?! -Onew se incorporó- ¡Te has desmayado, ¿y tienes el valor de decir que no ha pasado nada?!
-Onew...
-¿Onew qué? ¿Ni con estas me vas a contar que es lo que te pasa ultimamente?
-Vereis...
-¡Uy! Tengo que llamar a Kai y Jonghyun para decirles que estás bien, que no pudieron venir porque no están en la ciudad, pero se quedaron muy preocupados.

Salí y los dejé hablar solos, no pintaba nada ahí. Hice la llamada y esos dos se quedaron más tranquilos, prometiendo que en menos de 24h estarían ahí. Decidí que no era conveniente que entrase en la habitación durante los próximos 15 minutos, dado que tenían bastante de que hablar.
Comencé a pasear, yendo de un lado para otro del pasillo.

-Taemin... -Minho había aparecido de la nada.
-No es ni el momento, ni el lugar.
-Lo sé. ¿Cómo está Key?
-Se le ve bien, dentro de lo que cabe. En 10 minutos entraré para hablar con él.
-¿Quieres bajar a tomar algo?
-No, gracias, prefiero no irme lejos de la habitación por si pasa cualquier cosa.
-Está bien, me quedaré contigo pues. -estaba muy insistente.
-¿Qué quieres, Minho?
-Estar contigo.

El enfado no se me iba a ir tan fácilmente, pero no me apetecía estar solo en esos momentos. Ambos nos sentamos en las mismas sillas incómodas donde habíamos pasado la noche.
El silencio se mantuvo durante los 10 minutos que permanecimos ahí.

-Voy a entrar ya, ¿vienes?
-No, ya entraré más tarde.

Me extrañó que tardase tanto en querer entrar, pero bueno, yo ya no podía esperar más. Abrí la puerta y miré a Onew esperando un gesto de aprobación que no tardó en hacer.

-¿Os dejo solos?-le dijo Onew a Key.
-Sí, va a ser mejor.

Jinki se fue y la puerta se cerró tras él, yo me senté en una silla que había al lado de la cama.

-¿Qué te ha pasado, Key? ¿Por qué no nos contante que te encontrabas mal?
-Son muchas cosas, Taemin. Te cuento y luego si quieres le dices a Minho que pase. -tragué saliva.
-¿A Minho? ¿Para qué?
-Ya me ha contado Onew que estabas muy insistente en saber "qué te ocultábamos", bien, pues supongo que va siendo hora de que hablemos.

Se me paró la respiración. ¿Al fin me iban a contar de qué iba todo esto? 

1 comentario:

  1. OMO!! OMO!! OMO!! OMO!!! que pasa?!, que pasa?!!! porfavor quiero saber!! TT-TT sube el 6 lo más pronto posible unnie! waaa! me come la intriga! no se porque siento que estara triste lo que viene :S..... espero que no pfff

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