viernes, 25 de julio de 2014

LLUVIA Y LÁGRIMAS DE NOCHE

- Autora: Anna Bayé

- Twitter: Anna_Baye

- Tipo: EXO, Baekhyun, hetero, idol x fan, oneshot, menores 18



Ya es negra noche y tu sigues en la biblioteca estudiando. Solo faltan dos días para que empiecen los exámenes finales, y estas estudiando todo el tiempo que puedes para poder sacar la nota que te va a ayudar a poder entrar en la universidad que tu quieres. La sala en la que te encuentras ya casi esta vacía, la gran mayoría de los estudiantes ya se han ido a casa para dormir. Aún así, tu no puedes marcharte aún, simplemente por dos motivos. No tienes carné de conducir, por lo que tus viajes se rigen por los horarios del autobús, y aun queda como media hora para que el siguiente pase.
El otro motivo ya es más complicado, empezando por que también te impide estudiar todo lo que desearías. Dos mesas mas debajo de la tuya, en la otra hilera, está él, Byun Baekhyun. Nunca te has atrevido a hablar con él, pero siempre que esta en la misma sala que tú, tus ojos se desvían inconcientemente hacia él, con su sonrisa dulce que para ti ilumina toda la estancia.
Y ahora no es menos. Con su mano removiendo su pelo rubio, oculta su cara de tu vista detrás de su brazo, concentrando mientras estudia. Suspiras levemente, pero se oye por toda la sala. Sigues sin poder despegar tu mirada de él, por lo que optas por colocar tus dos manos a los dos lados de tus ojos, sin dejarte ver nada más que el libro abierto.
Pasan los minutos y tu apartas la mirada del libro. Has conseguido acabar a tiempo, aun quedan quince minutos para que el bus llegue. Desvías tu mirada hacia la ventana de tu lado. Todo esta completamente negro, solo la luz de la luna entra des de fuera. Te ves reflectada en el vidrio por la luz de sobremesa que tienes abierta. Y por lo que ves allí reflectado, te niegas a desplazar tu mirada. A través del vidrio, puedes ver como a tu lado hay alguien de pie que reconoces. Su camiseta negra con una camisa abierta blanca por encima, y esos pantalones blancos resaltan por encima del negro cielo que se ve.
Elevas un poco la mirada, sin dignarte a mover la cabeza, para ver la cabeza de ese cuerpo que siempre te deja sin aire en los pulmones y ves sus ojos negros con el brillo que le caracterizan. Poco a poco, notas como toda la sangre sube hacia tus mejillas, por lo que apartas la mirada y empiezas a guardar tus cosas. Hasta que su voz te detiene.

-Perdona, no quería molestarte.
Te quedas congelada sin poder articular palabra. Te gustaría girarte, decirle que no pasa nada y entablar una conversación que durase toda la noche. No importa el autobús ya, ni siguiera los exámenes. Pero tu cuerpo no sabe como reaccionar, así que solo asientes sin ni siquiera dejar de mirar tus libros, como si ellos fueran tu salvación, como si ellos fueran a decirle a ese chico que él es la causa de sus largas horas sin dormir, y no los estudios. Vuelves a empezar a guardarlo todo, sin levantar la cabeza. Oyes como se acerca más hacia tu dirección, por lo que tus manos empiezan a temblar notablemente. Intentas agarrar con más fuerza los libros que tienes en la mano, pero uno de ellos no parece quererlo, y cae haciendo gran ruido en el suelo.
Te giras para cogerlo, pero ves como una mano fina y delicada es más rápida que tu y enseguida te lo entrega. Otra vez tu cuerpo no reacciona como a ti te gustaría, y simplemente asientes, haciendo que el chico carraspee un poco.
-Sabes…- Su dulce voz suena cerca de tu oído, haciendo que toda tu piel se erice y casi arañes los libros. Él lo nota y con su mano aparta los cabellos que ocultaban tu cara y tu rubor, colocándolos detrás de tu oreja.- Siempre he querido hablar contigo, pero nunca me atrevía. Incluso ahora, cuando intentaba estudiar, tenia que taparte de mi vista, si no, me es completamente imposible concentrarme, y aun así me cuesta.
Su voz suena sincera y dulce, a la vez de persuasiva. Tú giras lentamente tu cabeza, para encontrarlo a pocos centímetros de tu cara. Vuestra mirada se conecta, notas una sensación que te recorre completa, pero no apartas la mirada para ver como lentamente se acerca a ti, centímetro a centímetro, hasta cerrar los ojos y notar sus labios sobre los tuyos.
Lentamente os separáis, pero sin despegar las frentes, que siguen en contacto, haciéndote ver que no estas soñando. Sigues con los ojos cerrados, sin querer abrirlos para no romper la magia, cuando notas como la mano del chico te vuelve a apartar los cabellos rebeldes que volvieron a deslizarse de tu oreja. Poco a poco, abres los ojos para encontrar ante ti la mejor vista que nunca habías pensado que serias capaz de ver. Sus ojos, posados en los tuyos, conectándoos como nunca antes lo habían echo con cualquier otros ojos. No puedes reprimirte, y subes tu mano hasta llegar a tocar su fina cara con el dorso de esta. Él cierra los ojos y retira su mano de tu cabella para ir a acompañar la tuya en su cara.
-Yo también siempre he querido hablar contigo…- Dices sacando fuerzas de tu corazón. Él abre los ojos para mirarte cariñosamente, y con la mano que tenia libre busca tu brazo para empezar a hacer pequeñas caricias.- Pero siempre estabas con gente y no me atrevía.
-Lo siento…- Dice él, despegando por primera vez su mirada de tus claros ojos, para bajar su mirada hacia tu boca.- Pero ahora que he podido probar tus besos, créeme que nunca más voy a estar con nadie mas a mi alrededor, que no seas tu.
Al oír aquella afirmación, tu corazón se reprime para luego empezar a bombear la sangre lo más rápido que nunca había hecho en toda tu vida. Él sigue con su mirada presa de tu boca, por lo que tú, armándote de valor, retiras tu mano de su mejilla para juntarla con la otra mano detrás del cuello de Baekhyun. Este, sorprendido, abre sus ojos y te mira picaramente, deduciendo lo que tanto has deseado hacerle des de que él se a atrevido primero.
Vuestros labios se vuelven a encontrar, dejando él dulce sabor de sus labios en tu boca, ya que enseguida se sale de tus labios para ir depositando cortos besos resiguiendo la línea de tu mandíbula hasta llegar a tu oreja, donde te muerde dulcemente el lóbulo.
-Creo que será mejor, que nos vayamos.- Susurra cerca de tu oído, causando que cierres con más fuerza los ojos y erizando por completo toda tu piel.- Además, esta empezando a llover.
Abres los ojos de golpe. Te habías olvidado por completo de donde estabas, y sobre todo de que te tenías que ir con el autobús. Te giras rápidamente para tener frente a ti la ventana, apoyas tus manos en él para poder ver como el vehiculo se iba calle arriba. Este era el ultimo que pasaba, por lo que ahora tendrías que llamar a tus padres para que te vinieran a buscar en medio de la cuidad, ya que vives en las afueras.
Suspiras y miras a tu alrededor, el chico no esta por ningún lado, incluso la mesa donde antes estaba él sentado estudiando, está completamente vacía, al igual que la sensación que crece dentro de ti. Vuelves a la mesa donde antes ya recogiste tus cosas, por lo que te colocas la mochila en la espalda y te encaminas hacia fuera. La puerta se abre delante de ti, dejándote salir bajo la lluvia. Te quedas allí parada, no tienes paraguas, aunque eso es lo que ahora te importa menos. Muerdes tu labio inferior, devolviendo el sabor dulce de sus besos y recordando estos últimos minutos.
Aún así, ahora ya no está. Ha desaparecido al que te has dado la vuelta, y te sientes sola, desprotegida, desilusionada… Las luces de la biblioteca empiezan a cerrarse, dándote a entender de que has sido la ultima en salir. La puerta se cierra detrás de ti, por lo que das un paso adelante y el agua empieza a mojarte rápidamente, y tú te maldices por no llevar paraguas. Intentas reprimir las lágrimas que amenazan por surgir de tus ojos, aunque no lo consigues, y dejas que se mezclen con el agua dulce que cae del cielo. Cierras los ojos e inclinas la cabeza hacia arriba, dejando que la lluvia recorra tu cara para esconder las lágrimas saladas que también bajan por esta.
De golpe, dejas de notar la lluvia caer en tu cara y como unos brazos te envuelven dulce y protectoramente. Por poco tiempo que hayas estado con él, reconoces la calidez de su abrazo y abres los ojos para volver a verlo a escasos centímetros de Baekhyun. Su mirada vuelve a estar posada en tus ojos, moviéndose preocupados por toda tu cara, analizando las finas trazadas que tus lágrimas han marcado en esta. Tú desvías tu mirada fuera de su cara, para ver que él esta sosteniendo un paraguas encima de vuestras cabezas, y que a vuestro lado, mal aparcado en la calle, esta un coche negro que reconoces por habértelo quedado mirando varias veces cuando él se marchaba de la biblioteca. Su dulce mano vuelve a acariciarte, pero esta vez tu mentón, para luego girar tu cabeza para conectar de nuevo vuestras miradas.
-¿Qué haces aquí fuera y mojándote?- Su voz refleja preocupación. Intentas volver a girar tu cabeza, pero él lo evita y te besa justo debajo del ojo, para luego pasar su lengua por sus labios.- ¿Estabas llorando?
-Yo… Es que pensaba que tú…- No puedes acabar ninguna frase, ya que el hipo causado por llorar vuelva a aparecer, y con él las ganas de llorar. El chico lo nota y te besa fugazmente en los labios justo antes de volver a pegar su frente a la tuya, conectando vuestras miradas.
-Nunca voy a dejarte sola, ni abandonarte… Perdóname, por favor.- Ahora es él el que tiene los ojos vidriosos, causando que tu corazón se haga pequeño al pensar que es por tu culpa. Subes rápidamente la cabeza hasta que vuestros labios vuelven a tocarse dulcemente. Al abrir los ojos, él te muestra su mejor sonrisa y se aparta de ti, cogiéndote la mano para guiarte hacia el coche mal aparcado.- Sube, te llevaré a tu casa.
- Pero yo vivo lejos de aquí.- Dices rápidamente, por no querer causar problemas.
- No me importa. Ya te dije que no te iba a dejar sola nunca jamás.

Él besa dulcemente tu frente para luego dejar que entres en el coche y cerrarte la puerta como todo un caballero. Da la vuelta al coche, se sube al lado del conductor y enciende el coche, para emprender un viaje juntos que no se acabará al bajar del coche. 

8 comentarios:

  1. Muy bueno... (y) manito arriba Unnie.... tus descripciones hacen volver mas allá de una simple imaginación....;)

    ResponderEliminar
  2. es unica , muy bonito

    ResponderEliminar
  3. Me encanto.Es la 1° vez que leo uno tuyo pero me ha encantado poniendo tanto detalle daebak posdata: así se escribe? (*¬*)/

    ResponderEliminar
  4. Muy interesante este texto, te invitamos a visitar nuestro blog www.rincondelcomecocos.com donde tambien escribimos entradas para hacer pensar y reflexionar. Buscamos colaborador@s y blogs para compartir banners. Un saludo y mucha suerte con este blog.

    ResponderEliminar
  5. Muy Bueno me dejo con intriga.

    ResponderEliminar
  6. Que bonito quiero llorar😢😂😘

    ResponderEliminar