I HATE YOU... BECAUSE I LOVE YOU

- Autora: @AkiShawol

- Tipo: Minho x fan, SHINee, +18, serial, hetero (aunque puede haber yaoi con personajes secundarios)

III

STALKER

Y ahí estaba, otra vez de camino a la escuela primaria. Las clases transcurrieron lejanas, apenas prestaba atención a sus alumnos. De vez en cuando miraba fijamente a Hyun Jae y lo ocurrido anoche le volvía súbitamente a la cabeza.

Por fin el timbre indicó el final de las clases, y como siempre los niños recogieron sus cosas y salieron. Todos menos uno.

Otra vez.

- Hyun Jae, ¿estás esperando a tu... hyung? - No, por favor, no, pensó Vic.

- ¿Van a volver las personas malas? – le preguntó el niño, con lágrimas en los ojos.

- ¡Oh no no no! Cariño, no te preocupes – Vic se acercó a Hyun Jae y lo abrazó – Cielo, las personas malas no van a volver, ¿vale? Te lo prometo – cogió un pañuelo de su bolso y se lo tendió al pequeño.

- ¡Hyun Jae! – la puerta se abrió de golpe y una figura alta entró corriendo hasta donde se encontraban Victoria y Hyun Jae - ¡¿Qué ha pasado?! ¡TÚ! – gritó señalando a Victoria - ¿QUÉ LE HAS HECHO? – cogió a Victoria de un brazo y la separó del niño con un movimiento brusco.

La chica intentó disculparse por todos los medios, diciendo que era por los periodistas del día anterior, pero Minho no estaba por la labor de escucharla. Se llevó a Hyun Jae fuera de clase, seguramente al lavabo para secarle las lágrimas, dejando a Victoria sola en clase.

- Se acabó. Estoy harta de este tipo. ¿Quién coño se cree que es?

Recogió su bolso y se dispuso a salir de clase, pero reparó en una libretita negra que estaba descansando tan tranquila sobre la mesa. ¿Será…? Victoria la abrió y pudo comprobar que efectivamente era una agenda, y solo podía pertenecer a una persona. La abrió por la fecha de hoy y leyó: todo parecían ser cosas típicas de famosos, como firmas de discos y demás. Pero hubo un acontecimiento que destacó sobre los demás.

<<18h30 - Acuario con Sulli ♥>>

¿Quién era Sulli? ¿Su novia? ¿Por qué le importaba siquiera?

Volvió a dejar la libreta donde estaba al tiempo que Minho y Hyun Jae volvían a entrar en clase. Lo tenía muy claro: lo seguiría.

Seis y veinte. Ya tienen que estar al caer. Victoria estaba esperando en el acuario desde hacía casi una hora, no quería perderse ningún detalle de la cita. La única pregunta que le seguía rondando en la cabeza era  por qué hacía esto.

Miró a su alrededor para ver si había alguna chica sola, y efectivamente ahí estaba: alta, guapa, con buen porte. Sí, definitivamente era la chica ideal para salir con famosos. Ahora solo hacía falta esperar un poco  más.

No habían pasado más de cinco minutos cuando apareció Minho. Victoria se preparó para seguirlos pero… ¿Cómo? ¿Esa no era la chica? Minho se sentó en un banco cercano, pasando de largo de la chica  apta para famosos. Vic se desconcertó un poco, pero siguió observando cada movimiento de Minho. Ahora se toca el pelo. Ahora mira a un lado. Al suelo. Hacia arriba.

Diez minutos más tarde, un chico se acercó a Minho, y este, con una enorme sonrisa de oreja a oreja, se levantó, lo abrazó, y cogiéndolo de la mano, entraron en el acuario. Victoria, quiero decir, la estatua con forma de Victoria, no se lo podía creer. ¿Sulli? ¿Un chico? Durante tantos años habría jurado que Sulli era nombre de chico, aquí y en cualquier otro lugar del mundo.

Se espabiló y entró corriendo en el acuario. Tenía que espiarlos como fuese. Así que Minho era de esos… ¿Por qué la trataba tan mal si no había intentado nada en ningún momento?

Se fue abriendo camino entre la multitud y a la lejos divisó la cabeza de Minho (como para no hacerlo, ese chico medía más que la Torre Eiffel). La gente fue pasando a la siguiente sala, pero Minho y su… amigo no. El tal Sulli se quedó mirando una de las peceras como si nunca hubiese visto nada parecido en su vida, mientras Minho lo tenía abrazado por la espalda y le susurraba algo al oído.

Victoria se quedó observando desde lejos, medio escondida detrás de una columna.

- Creo que verás mejor si te acercas un poco más.

Se dio la vuelta y se encontró frente a un chico apuesto con cara de niño. Este la miraba con una sonrisa burlona. Tierra trágame, pensó Victoria. Pero el chico parecía más divertido que otra cosa.

- ¿Sabes? Creo que no deberías estar aquí…

- Sí, bueno, yo… yo ya me iba – balbuceó Victoria – Solo estaba de paso y… esto…

- Tranquila mujer, no te pongas tan roja – dijo el chico pellizcándole la mejilla – Ven, salgamos de aquí.

Victoria no estaba segura de si obedecer, al fin y al cabo, ¿quién era?  Pero finalmente se movió.

- ¿De qué conoces a Minho? – le preguntó mientras caminaban hacia el exterior – No pareces nadie con quien saldría – añadió – Sin ofender…

- Oh, eh, Victoria. Me llamo Victoria – contestó mirando hacia el suelo. ¿Y ahora qué debía decir? Seguí a Minho porque me enteré de que tenía una cita, pero no, no lo conozco de nada. Sonaba demasiado estúpido. Y ahora que lo pensaba detenidamente: lo era – Yo… ya te lo he dicho, simplemente pasaba por el acuario y…

- No lograrás engañarme. ¿Quieres su autógrafo, no?

- ¡No! – casi gritó. ¿Por qué debía pedirle un autógrafo a una persona que se daba tantos aires? ¡Si ni siquiera sabía quién era!

- ¿No? Qué raro… - el joven se quedó pensativo.

- No me has dicho tu nombre – le recordó Vic.

- Me llamo Taemin, Lee Taemin.