sábado, 13 de octubre de 2012

IN YOUR EYES

- Autora: Brownie Patterson

- Twitter: @MEPP19


- Tipo: SHINee y EXO-K, 2min (Minho x Taemin), OnKey (Onew x Key), JongKai (Jonghyun x Kai), +18, yaoi, serial


CAPÍTULO 1



Me desperté muy cansado. Había dormido mucho pero no me había servido de nada. Fui a la cocina con la intención de tomar un café y vi una nota de Key avisándome de que él y Onew habían ido a la compra. Que peligro, esos dos en un supermercado. Miré la hora que era, y me sorprendí, era ya la 1 de la tarde, había dormido todavía más de lo que creía. Tenía pensado tomar un café, pero no había ni leche, ni azúcar. Así que decidí meterme directamente en la ducha. El primer chorro salió demasiado frío y tirité, y el segundo demasiado caliente, y me lamenté. Salí de la ducha y me puse lo primero que encontré, unos vaqueros y una camiseta básica gris. Hoy no tenía pensado ir a ningún sitio así que no importaba. Me sequé el pelo nada más que con la toalla, y abrieron la puerta.
-Ya estamos en casa, ¿te has portado bien?-dijo Key.
Le encantaba hacerme rabiar por ser como su hermano pequeño.
-¿Y la compra?-le pregunté, dado que ni traía bolsas, ni traía nada.
-La trae el hombre de la casa, pero le está costando lo suyo subir las escaleras.
-Pero si vivimos en un primero.
-¿Os callais?-dijo Onew mientras entraba agotado por la puerta- ¿Vosotros sabeis cuanto pesan estas bolsas? Por navidades exijo un carrito.
Key y yo estallamos a carcajadas. Onew se enfadó y dejó las bolsas en el suelo.
-Pues las colocais vosotros.
Acto seguido se tiró en el sofá y encendió la tele.
-Venga, Taemin, ayúdame a colocar todo esto.
-¿Habeis traído leche?
-Sí, ayúdame a colocar esto o no te dejo tomar tu café.
Hice un pucherito pero con él no funcionaban, así que accedí a ayudarle. Cuando terminamos, Key se puso a hacer la comida y yo me senté encima de las piernas de Onew con mi café.
-¡Quita de encima!
-Pues hazme un sitio, que ya sabes que Kibum no deja que nos acerquemos a la cocina cuando está creando.
Me miró con desprecio y apartó las piernas. Sonó el timbre.
-Abre tú, anda.-me dijo Onew.
-Mira que eres vago.
Me levanté y abrí la puerta, era Kai. Vive en frente de nosotros. Lo dejé entrar.
-Oh, que buena pinta tiene eso.-se acercó a la cocina.
-¡Atrás!-Key lo apuntó con un cuchillo.
Kai salió corriendo y se puso detrás de mí haciéndose el asustado. Nos sentamos en el sofá, con Onew.
-¿Y Jonghyun?-pregunté, dado que solían venir juntos siempre.
-Acaba de llegar del gimnasio, se ducha y viene.
-Ah, ¡¿os quedais a comer?!-gritó Key desde la cocina.
-Bueno, ya que nos lo ofreces.
Key refunfuñó. De 7 días que tiene la semana, Minho y Kai venían a gorronear por lo menos 4.
-Por cierto, ¿conoceis al vecino nuevo?
Onew y yo nos miramos extrañados.
-No, ¿hay un vecino nuevo?
-Sí, se llama Minho, me lo crucé antes en las escaleras, se acaba de mudar al 1ºC.
-Ah, ahora que lo dices, yo antes vi unos camiones de mudanza.-dijo Onew.
Yo no tenía ni idea de que teníamos un vecino nuevo, el 1ºC y el 1ºD llevaban 1 año deshabitado, esta planta era nuestra, pero bueno, tanto me daba.
-Es muy simpático, le dije que se viniese a cenar a casa, venid vosotros tambien.
Onew y yo asentimos.
Sonó el timbre de nuevo, esta vez era Jonghyun. Venía empapado. Key apareció como de la nada.
-No pensarás entrar en mi casa con el pelo goteando, ¿no?
-Pero...-un toallazo le calló la boca.
-¿Quien ha sido?
-Yo. -dijo Kai con una sonrisa picarona. Se acercaron y se besaron.
-Vaya dos...-suspiró Key. Y volvió de inmediato a la cocina.

--

Comimos y la tarde se pasó bastante rápido. Eran ya las 7 y Kai me pidió que le acompañase a hacer la compra, ya ni me acordaba de que hoy cenábamos todos en su casa. Hicimos la compra bastante rápido y fuimos a su casa.
-Me quedaré cocinando, vete a casa y avisa a esas marmotas de que a las 9 y media quiero aquí a todo el mundo.
Kai tambien tenía su lado de ama de casa, me reí y fui hacia mi piso. Onew y Key estaban dormidos abrazados en el sofá y Jonghyun estaba mirándose al espejo, haciendo bola.
-Jonghyun...¿qué haces?
-Eh, ¿yo? Nada, ¿cuanto tiempo llevas ahí?
-Haré como que no he visto nada.
Ambos reímos y nos sentamos en la cocina.
-¿Y Kai?
-Cocinando, te recuerdo que cenamos en vuestra casa.
-Ah, es cierto.-sonrió-tocará aguantar las críticas de Key a la comida de Kai, habrá una lucha entre amas de casa.
Nos reímos los dos. Miramos hacia la parejita que dormía felizmente y empezamos a cojinazos con ellos. Key refunfuñó y Onew saltó encima de mí.
-¿Quieres morir?
Y comenzó una guerra que pronto terminó cuando Key empezó a gritos con todos.
-¡Luego esto lo recogeis vosotros, eh!
Onew le dio un cojinazo en la cara y Key no pudo evitar unirse a la guerra. Eran ya las 8 y media, Jonghyun fue a casa y nosotros quedamos "arreglándonos". Yo simplemente me quité esa camiseta y me puse una camisa de color azul marino. Me peiné con las manos, total, en media hora volvería a tener el pelo revoloteado. Me di cuenta de que Onew todavía estaba tirado en el sofá cuando escuché los gritos de Key.
-¿Pero todavía estás así? ¡Arréglate ya! ¿O te tengo que vestir yo?
-Ya voy, ya voy.
Onew se levantó disparado y empezó a sacar cosas del armario. Key le tiene prohibido salir mal combinado. Estábamos ya todos arreglados y fuimos para el piso de Kai y Jonghyun. Timbramos, y tardaron bastante en llegar a la puerta. Cuando por fin la abrieron estaban los dos despeinados, Jonghyun sin camiseta y Kai sudando demasiado.
-Lo que yo decía, vaya dos.-dijo Key sonriendo de lado.
Kai se sonrojó y bajó la cabeza, nosotros entramos y nos sentamos en la sala mientras ellos se ponían decentes.
-Taemin, ¿pones la mesa?
-Que la ponga Onew que lleva todo el día descansando.
Me lanzó una mirada asesina y se levantó. Ya estaba todo preparado, Onew y yo nos moríamos de hambre así que nos sentamos, pero Kai apartó los platos de nosotros.
-¿Que haces? Tenemos hambre. -protesté.
-Todavía no ha llegado Minho.
-¿Minho?
-El vecino nuevo, idiota.
-Ah, cierto.
Ya ni me acordaba de que estabamos ahí para conocer a un vecino nuevo. Ya le estaba cogiendo manía por tardar en aparecer, pero sonó el timbre. Kai fue hacia la puerta.
-Pasa, pasa.
Me levanté para presentarme y se me paró el corazón en cuanto lo ví. Tenía un brillante cabello negro, y unos ojos grandes, preciosos. Una mirada un tanto misteriosa. Venía con unos pitillos blancos y una camisa y converse negras. Era guapísimo. No, eso le quedaba corto. Todos se presentaron y yo seguía parado mirándole fijamente.
-Amor a primera vista, ¿eh?-susurró Key.
Volví al mundo real.
-¿Qué? ¿Qué dices? Mientes.
Sonrió y apareció él ante mí.
-Hola, soy Minho.-sonrió de lado.
-Yo..yo soy Taemin, encantado.
Nos sentamos Onew, Key y yo en un lado de la mesa y Jonghyun, Kai y Minho al otro. Minho estaba en frente de mí, no parábamos de mirarnos.
-¿Y cómo es que te has mudado a esta zona?-como siempre, Key comenzaba la conversación.
-Llegué hace unos días a la ciudad de un viaje y no me apetecía seguir viviendo con mis padres, así que comencé a buscar piso y encontré este. Tengo un estudio de baile a 2 manzanas, y por aquí no pasa mucha gente. Es ideal.
-¿Bailas? A Taemin le encanta el baile.-dijo Key.
Le di una patada debajo de la mesa, y me asesinó con la mirada.
-Podríamos quedar para bailar juntos un día, si te parece bien.-clavó en mí sus enormes ojos.
-Eh...sí, a ver si estoy libre un día de estos...
Yo siempre estaba libre, pero bueno, intenté hacerme el interesante.
-Claro que quiere, mañana mismo está libre, podeis quedar temprano y desayunais juntos.
Esta vez la patada fue más fuerte.
-Vale, vale, ya me callo...-susurró.
-Yo no soy de madrugar, pero si quiere quedar mañana por la tarde estaré encantado.
-Claro, ya concretaremos.-le sonreí.
La cena pasó bastante agradable, Minho y yo no parábamos de intercambiar miradas. Y Key se reía por lo bajo de vez en cuando.
-Bueno, si no os importa me marcho ya, todavía tengo que desempaquetar algunas cosas y se me va a hacer muy tarde.
-¿Necesitas ayuda con algo?-le ofreció Jonghyun.
-No, no, muchas gracias por todo. -se giró y miró hacia mí- ¿Nos vemos mañana?
-Sí.
Sonrió, dio media vuelta. Nos deseó buenas noches y se marchó. Key me agarró del brazo.
-Nosotros tambien nos vamos, que Taemin me tiene que contar cosas, me parece.
Kai agarró mi otro brazo.
-Que las cuente aquí, que yo tambien quería hablarle de eso.
-No sé de que hablais, yo estoy muy cansado.
Me liberé de sus manos y salí por la puerta, Minho todavía estaba entrando en su piso. Se giró y me miró. Sonreí y me metí corriendo en casa.
Al momento entraron Key y Onew, y Key volvió a acorralarme.
-Mañana quiero detalles de todo lo que ocurra.
-No va a ocurrir nada, solo hemos quedado para bailar.
-Sí, ya. Por cierto, como me vuelvas a dar patadas no te cocino en un més.
Sonreí y me metí en la cama. Sonriendo como un idiota. No se me quitaba de la cabeza. Ni él, ni su mirada, ni sus perfectos labios, ni esa sonrisa.



--

Desperté, miré el reloj y ya eran las 3 de la tarde. Me sorprendí, ¿cómo podía haber dormido tanto?
-Hombre, bella durmiente. Levántate ya, has quedado a las 4 con Minho.
-¿Qué? ¿Cuando?
-Me lo encontré en las escaleras por la mañana y le dije que pasase a buscarte a esa hora.
Me levanté corriendo, lo habría matado ahí mismo de no ser porque no me llegaba el tiempo. Me di una ducha rapidísima, aunque no se para qué porque si íbamos a bailar de poco serviría. Salí de la ducha y me puse un chándal gris un poco ceñido.
-Te paso que vayas en chandal, porque vais a bailar.-entrecomilló con las manos.
-Sí, vamos a bailar.
-Sí, sí...
Iba a perseguirle pero sonó el timbre. Key y yo echamos una carrerilla pero me ganó y abrió él.
-Hola, vengo a buscar a Taemin, cómo dijiste.
Key lo miró de arriba a abajo y se giró.
-No está nada mal, eh.-me susurró.
Le di un empujón muy mal disimulado, Minho nos miraba con cara extrañada. Le sonreí y salí. Key iba a decir algo pero le cerré la puerta en las narices. Bajamos las escaleras en silencio y salimos del portal.
-¿Por dónde queda ese estudio de baile?
-A dos manzanas, como bien dije ayer, llegaremos en 5 minutos.
Durante el camino había poca conversación, me sentía cómodo con él pero no sabía de qué hablar. Llegamos al estudio, estaba completamente vacío.
-Pero esto está cerrado.
Minho se rió y sacó unas llaves del bolsillo.
-¿Eres el dueño?
-No, pero es amigo mío, y los domingos como no abre me deja las llaves para que venga. No me gusta estar con más gente.
Entramos, dejamos nuestras mochilas en el vestuario y comenzamos a bailar. Me quedé impresionado, se le daba muy bien. Entre canción y canción caíamos rendidos al suelo, nos mirábamos, sonreíamos y nos volvíamos a poner en pie. Así pasamos la tarde, aunque no hablásemos, nos entendíamos. Eran ya las 7, no podíamos más, y fuimos al vestuario.
Cuando iba  a coger la mochila, Minho me agarró del brazo y me empujó contra las taquillas. Me besó de una manera salvaje.
-¿Nos duchamos juntos?-me susurró a unos milímetros de mis labios.
Me volvió a besar, y por un momento me planteé detenerle. Pero sabía perfectamente que yo tambien quería, así que, ¿para qué pararle? Se quitó la camiseta y tambien me quitó la mía. Me besó el cuello y siguió bajando por mi torso. Paró un segundo por debajo de mi ombligo y sonrió. Desabrochó mi pantalón y se deshizo de todo, tanto de mis prendas como de las suyas. Me subió a su cintura y me llevó hacia la ducha, y mientras nos empapábamos pude notarle dentro de mí. Una y otra vez, cada segundo más rápido. Grité, no lo pude evitar. Y él soltó algún que otro grito también. Me seguía besando mientras los chorros de agua caían sobre sus mechones, su torso, sus piernas, y finalmente en el suelo de la ducha. Todo terminó en un grito mútuo de placer.
Nos vestimos y salimos en dirección a nuestro edificio. Durante el camino de vuelta tampoco hubo muchas palabras, pero seguíamos echándonos miradas y sonriéndonos el uno al otro. Llegamos, subimos las escaleras y me acompañó hasta la puerta de mi piso.
-Hasta mañana, encanto.-me besó, sonrió y se fue.

1 comentario: