martes, 11 de septiembre de 2012

STALKER

- Autora: Akane Lee

- Twitter: @little_akane

- Tipo: Teen Top, serial, hetero, idol x fan, Niel x noona, +18 


CAPÍTULO 13: LUJURIA Y AMOR



*Nota de la autora: Pongan esta canción y que se esté repitiendo mientras leen este capítulo: Junsu - Intoxication http://www.youtube.com/watch?v=hp1913GNx9E *



Me acerqué lentamente y soplé sobre su glande, soltó un gemido, sin apartar mi vista de la suya, pasé mi lengua por todo su glande, gimió aún más fuerte y arqueó su espalda. Con mi lengua recorrí toda la extensión de su falo de arriba abajo y viceversa.

-Ahhhh nunaaa

Dejé de torturarlo e introduje su pene en mi boca, degustando cada parte de él, era exquisito, poco a poco fui aumentando el ritmo, y él sus gemidos, tenía los ojos cerrados, estaba disfrutando del placer que le estaba proporcionando…

-Nuna, voy a…

Hizo el intento de apartarme, pero nuevamente tomé sus manos entre las mías y aumenté el ritmo, no tardo mucho en venirse en mi boca, soltando un sonoro gemido y arqueando aún más su espalda. Saboree su esencia, mi lengua se encargó de limpiar los restos que quedaban en su pene.

Me senté de nuevo sobre de él, quedamos frente a frente y nos besamos apasionadamente, no le importó probar de su propia esencia que aún quedaba en mis labios. El beso era más demandante, cargado de lujuria, sus manos apretaban mis glúteos de manera deliciosa, me mordía el cuello, besaba mis labios. Poco a poco volvía a estar listo para más…

-Nuna, es tu turno…

Hizo el intento de recostarme en el sillón pero no lo dejé…
-Esta vez te toca disfrutar a ti, otro día será mi turno, quiero entregarme completamente a ti.

Me levanté para tomar su pantalón, saqué su cartera bajo su mirada atenta, encontré lo que estaba buscando…

-Vamos a darle uso a estos condones, no sea que se echen a perder en la cartera…

Volví a pasar mi lengua por todo su falo, dándole una pequeña mordida en su glande, luego de esto le puse el condón. Me quité la prenda que sobraba, y me volví a sentar sobre de él, colocando la punta de su pene en mi entrada, me movía lentamente, mientas mordía su labio inferior, poco a poco me fui auto penetrando, pero quedándome a la mitad y dejé de moverme. Solté su labio y nos quedamos viendo, devorándonos con la mirada, de repente me tomó de la cintura con sus manos y me empujó hacia abajo, para terminar de penetrarme, a lo cual no pude evitar gemir de placer, mis brazos rodearon su cuello, nos besamos desenfrenadamente mientras empezábamos a movernos a un ritmo tortuosamente lento que pronto fue aumentando de velocidad.
Se sentía tan bien, llenándome toda, nuestros cuerpos se acoplaban demasiado bien, como si hubiesen sido creados el uno para el otro. De repente tocó un punto que me hizo gritar de placer y arquear mi espalda. Sus reflejos fueron rápidos y me tomó por la cintura, evitando me pudiera caer. Se dio cuenta que había encontrado un lugar con el cual me hacía tocar el cielo y las estrellas, fueron varios orgasmos seguidos, haciendo que mis paredes vaginales se contrajeran y aprisionaron mas su pene, cosa que él también disfrutaba, ambos sin planearlo nos venimos al mismo tiempo, nuestros gemidos se acompañaron, me recostó en el sillón, con mucho cuidado y sin salir aún de mi, nos quedamos un rato recostados, abrazándonos, tratando de recuperar el aliento, regulando nuestra respiración, ambos estábamos bañados en sudor. Lentamente se salió de mí, ganándose un gemido de reproche por parte mía.

-Gracias nuna, fue maravilloso
-Estuviste genial para ser tu primera vez
-Te amo nuna
-Y yo a ti Daniel

Nos besamos tiernamente, luego posó su cabeza en mi pecho, mientras yo le acariciaba su cabello. Nos quedamos así un rato más.

Revisamos el reloj y nos dinos cuenta que ya habían transcurrido 2 horas, por lo que rápidamente nos metimos a bañar, sin intentar nada más, de lo contrario a Niel se le haría demasiado tarde y no sabía cuánto tiempo iba a estar C.A.P. en esa dichosa junta.

Llamé a un taxi, pidiendo que entrara al estacionamiento, hasta ahí acompañé a Niel para despedirme de él.
Nos despedimos con un beso apasionado, para recordarnos lo mucho que nos amábamos y que esperábamos volver a repetir esa sesión de sexo tan genial, todo esto sin estar consientes que éramos observados a lo lejos…

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