jueves, 27 de marzo de 2014

MY WAY

- Autor: Khupi

- Twitter: @aliziakv

- Tipo: Yaoi, +18, Jihoon/Rain x Joon (MBLAQ), serial.

*Me refiero a Rain también como Jihoon.



CAPÍTULO 1


Las cosas no estaban marchando demasiado bien estos últimos meses. Se habían acumulado las entrevistas, los anuncios que grabar, los programas a los que asistir, etc. Además del importante concierto dentro de dos semanas en Seúl. Tal vez era demasiada presión para los principiantes, pero Rain les exigía sin vacilar que se esforzaran al máximo. Debían soportarlo para alcanzar el éxito, es el precio que deben pagar, entregarse por completo.

En general, aunque no paraban de quejarse, todos podían sobrellevar la carga a la que estaban sometidos, todos menos uno de ellos, Lee Joon. Su cansancio no era físico, sino mental, ante tanta imposición por parte de Rain. Estaba alcanzando un punto de inestabilidad en el que ya no conseguía controlar su nerviosismo y su rabia cuando Rain les daba alguna orden de mala manera o les gritaba. Esto no era una actitud usual en el sunbae, pero la falta de resultados le sobrepasaba, sobre todo cuando él se entregaba por completo en el trabajo.

En la última ocasión, al terminar la grabación de un programa en el que los chicos no habían estado lo suficientemente brillantes, Jihoon les reprochó enfadado todos sus fallos durante el baile que habían hecho. Todos asintieron sin rechistar a la bronca, lo que ponía aún más nervioso a Rain, al ver la pasividad de los cinco. En aquel momento los abandonó allí, sin dejar que su manager los llevara a casa, como castigo. Él buscaba una reacción por parte de ellos pero nunca la recibía. Sin embargo aquel día notó algo diferente en Joon, y es que fue el día en el que finalmente el joven estalló. Él se reprimió durante todo el sermón, apretando los puños y los dientes con fuerza, pero en cuanto Rain se marchó, se desahogó pegando un fuerte puñetazo a la pared que tenía enfrente, asustando a sus compañeros. El puñetazo fue acompañado de un fuerte grito lleno de rabia. Aquel signo de cambio llamó la atención del mayor, que durante el camino de regreso a casa no dejaba de visualizar a Joon conteniendo su rabia. 

Al ser precisamente Joon, quien más desconcentrado estaba y el más afectado por la presión, Rain decidió ser aun más duro con él. Quería que llegara a su límite y empezara desde cero, que aceptara de una vez la ayuda del mayor y siguiera sus consejos. Se iba a convertir en una auténtica tortura para Joon, pero así sacaría todo el potencial que tenía.

Los siguientes días los chicos debían pulir los bailes de sus canciones para hacerlo perfecto en el concierto. Para ello se reunieron con Jihoon en la sala de baile, una amplia estancia con espejos en lugar de pared, un suelo de parqué, buena iluminación y un gran equipo de música. Durante cuatro largas horas practicaron sin ningún tipo de descanso todas sus canciones, todo bajo la atenta mirada de Jihoon. Esta vez se había limitado a mirar, no les había corregido en ninguna ocasión a pesar de que veía fallos y falta de pasión en los movimientos. Los cinco estaban demasiado agotados para continuar. Mir y Cheondung ya se habían tirado jadeantes al suelo, completamente sin aliento. Seungho, ejerciendo de líder, decidió acercarse a Rain que estaba sentado en una silla con las piernas cruzadas, observando desde la distancia. 

– Hyung – hizo una pausa el líder, tratando de controlar la respiración. – ¿Podemos descansar un momento? – preguntó con mucho respeto y sin esperanzas, porque ante estas preguntas siempre les obligaba a seguir bailando aún con más empeño. 

– Está bien, por hoy no haréis más. – dijo el sunbae entre suspiros mientras se levantaba de la silla. Vestía una camiseta de tirantes oscura, que dejaba descubiertos sus trabajados brazos, y un pantalón ancho de color gris, perfecto para bailar cómodamente. Pero aunque era ropa de deporte, hoy él no había bailado junto a los cinco chicos. Este hecho había desconcertado un poco a los jóvenes, acostumbrados a tenerlo siempre repitiendo junto a ellos un mismo paso cien veces, pero estaban muy cansados para preguntar a qué se debía. – Id a casa y descansad. – dijo finalmente. 

Seungho perplejo abrió la boca para decir algo, pero se abstuvo. Volvió con los demás y les comunicó lo que su sunbae le había dicho. Todos se extrañaron pero aceptaron encantados. 

Joon estaba intentando recuperar el aliento, de pie y con las manos apoyadas en su cintura. Tenía la ropa completamente empapada en sudor, marcando sus músculos y haciendo brillar su piel. Al igual que el pelo húmedo, que se quedaba pegado en su frente. Se llevó las manos a la cara y después se retiró el pelo hacia atrás. Últimamente lo llevaba demasiado largo, y por mucho que lo recogiera en un moño le molestaba mucho, pero no podía cortárselo porque era su nueva imagen. A pesar del cansancio, estaba contento de poder irse a casa. Ladeó la cabeza hacia la dirección en la que estaba Rain y vio a éste aproximarse hacia él a paso lento. No sabía si le iba a decir algo, pero no se quedó allí parado para averiguarlo. Cansado, empezó a recoger como el resto, intentando evitar a Rain. 

Rain iba acercándose a Joon para decirle algo, pero el joven se hizo el despistado. Ante esto, Rain solo pudo esbozar una media sonrisa sarcástica. Ya estaban saliendo por la puerta los cinco cuando los interrumpió. 

– Tú no. – dijo señalando a Joon. 

Joon lo miró totalmente desconcertado pero antes de poder decir nada Rain lo cogió de la muñeca y lo arrastró unos metros al interior de la sala sin ningún esfuerzo pese a la resistencia del joven. Joon después por fin pudo zafarse de él y se separó unos pasos, estaba confuso. 

– ¿Por qué yo? ¿Y los demás? ¿Qué he hecho? – preguntaba el joven entrecortadamente. Rain le imponía mucho respeto y viéndolo tan serio temía que le fuera a echar una bronca. Pero todavía no entendía por qué sólo a él, dejando que los demás se fueran a casa. 

– Marchaos ya. – ordenó Jihoon a los demás, ignorando por completo a Joon. Su tono de voz no era desagradable, pero se le notaba serio. Les hizo un gesto para que cerraran la puerta al irse. Los demás chicos miraron a Joon sin saber que hacer pero finalmente hicieron caso al jefe. 

Rain fue a por una botella para dejarla en el centro de la sala, preparó el equipo de música y volvió a donde estaba Joon con una mueca de fastidio. 

– Te he estado observando Joon. –le dijo con calma mientras hacía unos estiramientos. – No lo estás haciendo bien y necesitas unas horas extra para poder alcanzar a los demás y hacerlo perfecto. –lo miró a los ojos pero Joon lo evitaba, el joven estaba empezando a cabrearse puesto que él no opinaba igual, se estaba esforzando mucho y ¿ahora le pedía más? 

–Vamos, ¿a qué esperas? Deja la mochila y prepárate. –le instó Rain mientras apuntaba con el mando al equipo de música, listo para darle al play. 

En ese momento Joon tiró la mochila unos metros más allá, totalmente agotado y sin ánimos para hacerlo. Además se moría de sed y había sudado mucho. Se preparó y en cuanto sonó la música bailó, pero no enérgicamente y mirando al suelo todo el rato. Antes de que siguiera haciéndolo así Rain paró la música y lo interrumpió. 

– ¿Qué crees que haces? No puedes bailar peor. Más energía. –le reprochó al joven, alzando un poco la voz. Joon lo miró un instante, jadeante. 

– ¿Puedo beber un poco de agua? – preguntó entre dientes, algo furioso. 

– Cuando te la ganes. –respondió secamente Rain, volviendo a poner la música. 

Joon resopló apretando los puños, tenía ganas de matarlo. Bailó más enérgicamente, pero torpemente, sin técnica. Estaba agotando las pocas fuerzas que le quedaban. Ante esto Rain no paró la música para corregirle. Se puso detrás de él mientras Joon seguía, aunque preguntándose por qué Rain se estaba moviendo. A través de los espejos Joon vio como el mayor cogía el ritmo de la canción, y de repente notó como chocó contra su cuerpo, por la espalda. Rain se había abalanzado a la espalda de Joon, que se asustó. Colocó una mano en el muslo del joven agarrando su pantalón con fuerza, y con sus labios casi a la altura del oído de Joon le indicó cómo tenía que hacerlo. 

– Tienes que abrir más esta pierna. – susurró Rain, que lo sujetaba con mucha fuerza, apretando el cuerpo de Joon contra el suyo. Él nunca les había enseñado así. La presión del cuerpo tan grande de Rain y su agradable aroma corporal abrumó a Joon unos instantes antes de reaccionar. Hizo torpemente el movimiento  de baile guiado por la robusta mano de Rain, que estaba peligrosamente cerca de una zona sensible. Joon esperó a que Rain se separara de él pero éste no lo hacía, así que el joven ladeó la cabeza para mirarlo y se encontró con los labios de Rain demasiado cerca, notando su fresco aliento. Rain también lo miró, acortándose más la distancia entre ambos, pero entonces dejó de sujetar a Joon, que cayó al suelo por estar distraído. 

– V-voy a beber agua. –tartamudeó Joon, gateando hasta la botella. Pero antes de poder llegar hasta ella Rain lo agarró de una pierna y sin esfuerzo lo arrastró, dejándolo tumbado boca arriba. No iba a dejar que bebiera, solo cuando lo mereciera. Encerró a Joon entre sus pies, mirándolo de pie. – Ya te he dicho que te la tienes que ganar. Y de momento no has mejorado nada. – la voz de Rain sonaba calmada, en contraste al nerviosismo de Joon. Ahora mismo el joven no estaba enfadado, pero si muy confuso y nervioso, sin saber muy bien por qué. 

– ¡Pero me voy a morir de sed!–rogó el pequeño. 

Siguiendo las indicaciones de Rain, se puso de pie para volver a hacer el baile. Ya no pensaba con claridad, el cansancio iba a matarlo. Pronto volvió la rabia al ver cómo Jihoon se burlaba de él bebiendo delante de él. Se estaba pasando. Joon dejó de bailar y dio un manotazo a la botella, sin pensar en lo que acababa de hacer. La botella salió disparada, derramando parte del agua sobre el cuerpo del mayor. Joon lo miró intensamente, sin miedo. Rain le devolvió la mirada y lo agarró por los brazos con fuerza, empujándolo contra la pared y dejándolo acorralado. Joon se intentó librar pero no tenía tanta fuerza. Esperaba que Rain le gritara, o incluso que le pegara por su insolencia, pero no fue así. En ese momento Rain se aproximó a Joon lentamente, cada vez acortando más la distancia y lo besó con fuerza. Al principio Joon no reaccionó, es más, intentó apartar la cara pero no podía. El mayor lo besó sin piedad, sin dejarle casi respirar, unos besos acelerados y ardientes que poco a poco fueron correspondidos por el joven. El ritmo continuó así un rato hasta que pasó a ser más lento y los labios solo se rozaban, agotados. Rain se separó solo unos centímetros, con la frente pegada a la de Joon, recuperando la respiración. No dijeron ni una palabra, tampoco podían mirarse. Ninguno sabía qué acababa de pasar, no podían pensar con claridad, tenían mucho calor, estaban demasiado excitados. Finalmente Rain disminuyó la fuerza con la que lo agarraba, que había dejado marcas en los brazos de Joon. Lo soltó y se dio la vuelta sin dejar que Joon lo pudiera mirar a la cara, no podía verlo, sentía demasiada vergüenza por lo que acababa de hacer. Tampoco quería que Joon viera su excitación, bastante evidente en una zona de su cuerpo. Rain recogió rápidamente sus cosas. En cuestión de segundos abandonó la sala sin decir nada, cabizbajo. Joon se quedó helado, en la pared, con el corazón a punto de desbordarse y sin poder ocultar tampoco su excitación ante un beso tan fogoso. Pero no había sido un beso cualquiera, lo acababa de besar otro hombre, su hyung, Rain…

5 comentarios:

  1. Cuándo actualizarás? :C

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  2. sigueeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee me muero esta genial!!

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  3. Me alegro de que os guste, gracias por comentar y leerlo. En cuanto termine los exámenes continuaré, en verano, con más tiempo ^^

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  4. LA PERSONA QUE ME LO ENVIO ESTA TODAVIA ASOMBRADA DE LO OCURRIDO, YA QUE ELLA DICE QUE LO HIZO POR HACERLO Y QUE PIDIO ALGO QUE CREIA CASI IMPOSIBLE DE LOGRAR PROBEMOS.
    * Para ti mismo di el nombre de la unica persona del sexo opuesto con quien quieras estar (tres veces...)...
    * Piensa en algo que quieras lograr dentro de la proxima semana y repitelo para ti mismo(a) (seis veces)...
    * Piensa en algo que quieras que pase entre tu y la persona especial (que dijiste en el no. 1) y dilo a ti mismo/a (doce veces)...
    * Ahora haz un ultimo y final deseo acerca del deseo que escogiste.
    * Despues de leer esto tienes 1 hora para mandarlo a 15 temas y lo que pediste se te hara realidad en 1 semana.
    A la mayor cantidad de gente a quien lo mandes mas fuerte se hara tu deseo.
    Si tu escoges ignorar esta carta lo contrario del deseo te sucedera,
    o esto no sucedera jamas..............
    Que tus días estén llenos de logros y tus noches de sueños copia y pega esto en 15 o + temas

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