- Autora: Laura
- Twitter: @LauraBlackRoses
- Tipo: B.A.P, hetero, +18, idol x fan, Daehyun x fan, serial
CAPÍTULO 11: NUEVA CIUDAD
-El paseito
te vendrá bien, ya lo verás, cariño- su madre iba agarrada a su brazo. Le había
más bien obligado a ir a hacer la compra con ella.
Daehyun
estaba pasando unos días en Busan en casa de sus padres, ya que el médico le
había dicho que necesitaba mucho reposo. Llevaba 2 semanas en casa aburrido sin
hacer nada, solo mirando el móvil y viendo la tele o cogiendo el ordenador... y
comiendo de la comida de su madre, por supuesto.
Sus amigos
lo habían llamado para saber como estaba y que se recuperara pronto que lo
necesitaban con fuerzas. Además otra cosa buena era que las fans le estaban
mandando muchos mensajes de apoyo.
-¡Buenos
días ajumma!- contestó una mujer que no tendría más de 30 años.
Estaba en uno
de los muchos puestos de verdura que había en aquel sitio- Veo que no viene hoy
sola.
-No, hija.
Mi hijo necesitaba andar y salir a la calle.
-Ya lo veo.
-Que grande
está ya tu Daehyun...- dijo otra señora que se acercó. Y así empezaron a hablar
sin parar las mujeres. Que si "noséquién" se había casado con
"nosécuánto", que si "tal" se había ido a vivir con
"cuál". La verdad es que eso lo había echado un poco de menos. Era
como viajar al pasado y volver a la infancia. El móvil le empezó a sonar.
-Disculpad-
se alejó un poco de ellas y contestó a la llamada. Era Himchan- ¡Hola hyung!
-Daehyun... ¿Te acuerdas que nos dijiste qué
si algún hombre se acercaba a Libia te avisáramos?
-Ajam-
frunció el ceño- ¿Qué pasa?
-No quiero preocuparte, pero hay un
occidental que está hablando con ella en la barra y no hace más que tocarle el
pelo y mirarla de arriba a abajo.
-¿Y ella no
hace nada?
-Se le ve un poco avergonzada, pero parece
que no le molesta
-Bueno, a
lo mejor es amigo suyo....
-Puede ser... Siento molestar tu descanso...
Recupérate- y colgó. Daehyun miró el teléfono y suspiró. La verdad es que
no sabía por qué hacía eso. Parecía un acosador que estaba estudiando cada
movimiento que hacía. Si ella lo supiera, lo más probable es que no quisiera
verle más y se olvidaría de él. La conocía muy bien.
Mientras tanto...
-A lo mejor
es amigo suyo- se dijo a sí mismo. Negó con la cabeza y entró a la cafetería.
Al abrir la
puerta pudo ver como la "pareja" le miró. Himchan hizo una breve
inclinación, saludándolos y se fue a la mesa en la que siempre se sentaban
ellos. Más conocida, como la mesa 8. Un sitio sagrado y en el que les contó
Libia, nadie quería sentarse porque sino perdía la esencia. Recuerda que cuando
contó eso, todos rieron por las ocurrencias de las fans.
-¡Buenos
días Himchan!- saludó Libia que se había acercado para apuntar el pedido- ¿Qué
deseas esta vez?
-¿Cuantas
veces tengo que decirte que me llames Oppa?- la chica lo miró curiosa con una
ceja alzada. Cuando ese chico estaba "molesto" ponía voz de niño
pequeño. Sólo le faltaba hacer aegyo.
-Vale..."Oppa"-
dijo con rentintín. Himchan rió ante la voz de ella- ¿Qué vas a tomar?
-Lo de
siempre- ella asintió y se dirigió a la barra nuevamente.
Ese día
estaba ella sola, ya que Soki tenía cosas que hacer en una reunión. Además, el
sitio no estaba muy lleno esa vez, por lo que podía llevarlo sola
tranquilamente.
-Aquí
tienes tu Café Americano...- Himchan la miró con las cejas alzadas esperando la
palabra mágica-... Oppa- el mayor asintió satisfecho con su trabajo. Libia negó
con la cabeza al ver el gesto del mayor. Fue a proseguir con su trabajo, cuando
Himchan la agarró de la muñeca, haciendo que ella mirara hacia él.
-¿Quién es
él?- Libia lo miró sin comprender- El chico occidental, ¿quién es?- ella miró
hacia la barra donde estaba Max tomándose un café tranquilamente mientras
miraba aquel cuaderno.
-Es un
amigo
-Ten
cuidado con lo que haces... Ya sabes lo que pasó la última vez- Libia bajó la
mirada apenada. Aunque sabía que Himchan no lo había hecho con mala intención,
esas palabras todavía le dolían. La culpable de que B.A.P no pudiera seguir con
sus promociones y sus actuaciones en directo, era ella- Lo siento, Libia..
yo...
-No te
preocupes, Oppa- lo miró a los ojos y sonrió como si no hubiera pasado nada-
Tendré cuidado, lo prometo- el chico la miró a los ojos y pudo ver que no
mentía.
Desde la
primera vez que la vio, lo que más le gustó de ella fueron sus ojos. A parte
del color, siempre le parecieron muy bonitos. Ya que tenían ese brillo especial
y esa forma gatuna que tanto gustaban.
-Otra cosa,
Libia- la chica se giró a mirarlo nuevamente- Mañana vamos a ir a Busan a ver a
Daehyun... Te lo digo por si quieres venir con nosotros.
-Mañana
trabajo- el mayor asintió apenado- Pero solo trabajo por la mañana. Supongo que
por la tarde podré coger un tren e ir para allá.
-Si es así,
entonces te espero y nos vamos juntos- dijo entusiasmado.
-No es
seguro que cojas un transporte público. Te aseguro que voy a estar bien sola-
no le gustaba mucho la idea de dejarla ir sola, pero tenía razón. No era seguro
que cogiera un tren.
-Pero
cuando llegues, avisa- la chica asintió con una sonrisa y siguió con su trabajo
ya que por la puerta había entrado clientela.
A la mañana
siguiente...
-¿Entonces
Noona viene?- preguntó entusiasmado Zelo. Himchan le asintió.
Estaban de
camino, ya que el manager se había ofrecido en llevarlos personalmente.
Llevaban 2 semanas sin verle, y la verdad es que lo echaban de menos. Casi
siempre sobraba comida cuando pedían para comer.
-¿Cómo
estará?- preguntó Youngjae mirando por la ventana.
-Seguro que
muy aburrido... Ya le conoces- contestó Yongguk.
-No, me
refiero a Libia...
-Ayer
estaba bien... Aunque todavía se siente mal por lo que le pasó a Daehyun-
contestó Himchan.
Todos
guardaron silencio de repente. La verdad es que no sabían como después de la de
veces que lo habían dicho por la televisión, en las noticias, en internet y en
todas partes... Como después de todo eso, podía llevarlo así. Normal que lo
pasara mal.
-¿Pero
viene, no?- cortó el hielo Jong Up.
-Noona
vendrá, hyung- Zelo le pasó un brazo por los hombros- Noona aprecia mucho a
Daehyun hyung.
-Aunque
también se pelean mucho- contestó Youngjae.
-Son como
un matrimonio- después de las palabras de Jong Up, todos se miraron entre sí y
empezaron a reír recordando aquella semana en la que Daehyun pasó en el
hospital. Nunca habían visto a dos personas pelear tanto como esos dos. Pero
también pudieron ver como Libia estuvo pendiente todo el tiempo de él.
-¡Hasta el
lunes!- Libia se despidió de su jefa y fue directa a su casa.
A las 5
tenía que coger el tren que la llevaría a Busan. Un bonito viaje de 3 horas le
esperaba. Pero sentía que tenía que hacerlo, después de todo... Todo eso había
pasado por ella.
Al llegar a
su casa se dio una rápida ducha, se vistió cómodamente y cogió todo lo
necesario antes de irse camino a la estación de tren. Como aquella maleta que
preparó anoche y un regalo que le llevaba a Daehyun y que sabía que le iba a
gustar mucho. Era la primera vez que la hacía, así que esperaba que estuviera
rica.
Casi pierde
el taxi que la llevaba a la estación, y casi pierde el tren, pero no fue así.
Cuando se dio cuenta aquella voz enlatada decía que ya habían llegado a la
estación de Busan. Bajó del tren con sus cosas y toda aquella gente que había
subido a ese tren con ella. Miró su reloj de muñeca. Las 20:30, estaba
empezando a oscurecer. Como pudo sacó el móvil del bolso.
-¿Nuguseyo?
-¿Oppa? Ya
estoy en la estación
-Espera allí que ahora vamos a buscarte.
Libia
estuvo un rato esperando a que alguien llegara a por ella. Vio como la gente se
iba con su familia o por su propio pie. Suspiró. Odiaba esperar sola... era muy
aburrido.
Notó como
alguien le tapaba los ojos a su espalda. Se asustó y se dio la vuelta rápidamente
encontrándose con Zelo que se estaba riendo por su cara y a su lado Jong Up
igual que el anterior.
-Maldito
niño...- dijo mirándole mal.
-¡NOONA!-
Zelo se acercó a ella y la abrazó fuertemente. No sabía por qué, pero adoraba a
aquella chica y lo único que quería era abrazarla. Jong Up hizo lo mismo.
Tuvieron un
camino hacia la casa de Daehyun bastante curioso, ya que este vivía cerca de la
estación de tren. Iban con gorras e intentaban que la gente no los reconociera,
pero cada vez que una chica o un grupo de ellas pasaban cerca, se escondían o
fingían de una manera muy graciosa. A Zelo era al que más le costaba, ya que
con lo alto que era, era más difícil.
También le
dijeron que Daehyun no sabía nada de que ella iba a ir, que lo sabía todo el
mundo. Le habían dicho que iban a comprar chuches, para que no sospechara. Y
que se iban a quedar a dormir en su casa, ella también, porque los padres de
Daehyun los habían obligado. Que no dijera que no porque según le contó Jong Up
por palabras de Daehyun, la madre cuando se enfadaba daba miedo.
-¡Ya estamos aquí!-
gritó Zelo quitándose los zapatos en la entrada.
^w^..... (y)
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