miércoles, 22 de agosto de 2012

DIOS LOS CRÍA Y ELLOS SE JUNTAN

- Autora: Mª Angeles

- Twitter: @neki0_0


- Tipo: Yaoi, menores 18, YunJae --> Yunho x Jaejoong, DBSK/JYJ, oneshot




Un día más aburrido en este estúpido mundo, un día más mezclado con los humanos. ¿Qué no se dan cuenta de la mentira en la que viven? Los ángeles como yo lo sabemos solo que no podemos decir nada, es más, nadie nos escucharía. ¿Cómo explicarles que los lugares que sufren serán bendecidos y los que son bendecidos sufrirán? Yo lo intente y solo por eso me echaron del cielo convirtiéndome en un ángel renegado a sus ojos.

Miro al reloj y me doy cuenta de que ya son las 9 p.m. así que me toca irme a trabajar al mismo bar de siempre. No se porque pero ese bar tiene un aura que me cautiva, probablemente serán las esperanzas de los jóvenes cantantes que intentan lograr llegar a la fama actuando en uno de los bares mas famosos de todo Seul. Cojo las llaves y salgo de la casa caminando hacia el trabajo, ya que mi casa quedaba cerca, contemplando con cara de pena a todos los ilusos humanos caminando por la calle. Muchos ángeles abandonaron el cielo enamorándose de humanas pero no los entiendo, si todas son estúpidas y gritonas. Con esos pensamientos ingreso en el bar y me dispongo a ir a cambiarme.

-¡Yunho!-Giro para ver a Junsu, uno de los pocos humanos con los que he conseguido llevarme bien.
-¿Qué quieres Su?-Le digo esperando a que empiece a hablarme de Yoochun su nuevo novio.
-¿Sabes que hay un nuevo cantante en el club?-Dijo feliz dando saltitos.
-¿Ah, si? ¿Y quien es el afortunado que te va a quitar el puesto de mejor cantante del lugar?-Pregunte poniendo una medio sonrisa, sabia que él se iba a enfadar ya que una de las cosas más importantes para él era seguir teniendo el puesto de mejor cantante.
-Es Jaejoong, el hermano de Yoochun. ¡Y no me va a quitar el puesto? ¿¡Vale!? ¬3¬
-Jajaja. Esperare ansioso la actuación del nuevo, pero creo que te tendrías que ir que ya van a abrir.

Fue nombrar la apertura del bar y las luces se volvieron tenues y empezó a sonar una suave música, si, definitivamente acababan de abrir. Los clientes empezaron a llegar y con ellos se acababa mi poco rato de descanso porque estar detrás de la barra no era un trabajo fácil, ¿para que voy a mentir? Con tal fue pasando la noche distintos cantantes iban actuando. Tanto tiempo trabajando allí ya los conocía a todos, aunque hay que decir que la mayoría que actuaba allí eran niños mimados y egocéntricos que querían ser cantantes, eso si, tenían muy buena voz todos.

Junsu acabo de cantar como siempre entre grandes aplausos y el escenario oscureció, hasta que de repente una voz que me recordaba al canto de mis hermanos ángeles empezó a sonar. De repente los focos lo iluminaron, ¿quien era el? No solo su voz era preciosa, sino todo él. Tenia una piel de porcelana, tan blanca, tan pura; sus ojos eran dos pozos negros, en los cuales una vez entrabas te era imposible conseguir salir y su pelo, ¿qué puedo decir?, ese pelo negro y sedoso que le llegaba a los hombros y que de no ser porque estaba de cara a el creería que era de una mujer.

Me quede embobado toda la actuación mirándolo, era tan perfecto. Nunca creí que un humano pudiera provocar esos sentimientos en mí. ¿Eso era lo que sentían esos ángeles que lo dejaban todo por ir tras una mujer humana? No lo se, pero si lo era ahora los entiendo. Acabo de cantar agradeciendo al público y regalándome una sonrisa, espera, ¿me acababa de sonreír? No creo que fuera para mí, debía de ser para alguna otra persona del público, si, eso era. Era imposible dejar de pensar en el y aquella sonrisa hasta que recibí un SMS de Junsu diciéndome que le llevara una cerveza y un café a Jaejoong que lo estaba esperando en su camerino. ¡Ay Dios! ¿Tu quieres matarme o que?

Me dirigí hacia el camerino de Junsu para darle su cerveza, aunque no entendía porque me llamaba para esa tontería. Pero antes de llegar me encontré con Yoochun así que le di a el la cerveza para que se la entregara a su novio. Una vez cumplido el pedido de Junsu me tocaba el de Jaejoong, pero mis músculos no respondían. Estaba delante de su puerta con un nudo en la garganta y sin decidirme a picar o no. Finalmente después de mucho decidirme pique la puerta y con un "adelante" dicho de su parte entre, más fue abrir la puerta y quedarme helado. ¿Qué hacia sin camiseta? ¿Y es más, como es que tenia "eso" en la espalda?

-¡Ah! ¿Vienes a traerme mi café?- Pregunto con una sonrisa embelesadora en su rostro
-S-si, aquí tienes.- Me dirigí a la puerta para irme pero el me agarro de la mano
-¡Espera! Quédate un rato para hablar, por favor.- Rogó poniendo un puchero adorable. ¿Adorable? En que diantres estoy pensando >.<
-Cla-claro.-Dije a lo que inmediatamente me soltó y nos sentamos en unas sillas que habían ahí.- Me gusta tu tatuaje, nunca había visto a nadie con unas alas de ángel en la espalda.- Jae se puso a reír como loco, en serio no lo entiendo.
-¿De verdad nunca has visto a nadie con un tatuaje así? ¿Y que me dices de ti? Todos los ángeles renegados llevamos uno igual.- Dijo sonriéndome divertido, ¿como sabia el que yo era un ángel renegado?
-¿Pero de que hablas? ¿Yo un ángel?- Reí intentando disimular mi nerviosismo- Alguien tan imperfecto como yo seria imposible que fuera un ángel.
-Claro que lo eres- Afirmó acercándose poco a poco a mi hasta sentarse en mis piernas- Si no lo fueras nunca me hubiera enfrentado a Dios para poder volverte a ver- Susurró en mi oído para acto después besarme.

Correspondí al beso con la misma intensidad ya que ese chico me había cautivado con su presencia y su particular declaración. Si esto es lo que llaman amor no quiero que nunca se acabe ya que es una sensación maravillosa. Una vez dejamos de besarnos los dos sonreímos un largo rato en silencio hasta que se me ocurrió un refrán humano.

-¿Sabes? Se me acaba de ocurrir un refrán que dicen los humanos que nos describe perfectamente, Dios los cría y ellos se juntan- Dije a lo que Jae se puso a reír y sin poder aguantar lo volví a besar.

Este sería el comienzo de una historia que duraría toda la eternidad, eternidad que nada ni nadie nos podría quitar ya que siempre nos respaldaríamos el uno al otro. Dos ángeles caídos a los que Dios les dejó conocerse, dos ángeles que experimentaron un sentimiento humano llamado amor.



2 comentarios:

  1. Te expresas muy bien. Ha habido un momento en el que parecía que estaba allí. Me ha encantado. Espero poder leer otro fic como este. Tienes mucho talento.

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  2. *-* el mejor retrato que se puede hacer del YunJae es de dos ángeles *-* me ha encantado, sigue así! :3

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