CAPÍTULO 4: TONIGHT
G.O no paraba de correr, iba a JTune, tenía que saber inmediatamente lo que
había pasado con Blanca… Maldito móvil, estúpido aparato que se apaga cuando no
toca…
- ¡Joder! – chilló G.O mientras arrojaba su teléfono contra una pared.
Corría y corría, la gente le estorbaba, dificultaban su camino, mierda…
¿Por qué tenía que estar tan lejos la maldita empresa? Por fin llegó, por fin,
iba a llegar, sí, iba a llegar, iba a entrar por la puerta y ver a Blanca
ordenándoles la ropa y quitándole las arrugas mientras Mir y Thunder se movían
y lo desbarataban todo, sí, todo iba a ser como siempre… Pero cuando G.O cruzó
la puerta y vio las luces apagadas y que no había nadie, no pudo contener su
rabia y propició un golpe seco a la puerta, se hizo daño en la muñeca, un
pinchazo le recorrió toda la mano, pero cuando vio una nota colgada en la pared
todo el daño desapareció, sólo podía concentrarse en eso:
Hyung, Blanca está en el hospital,
nos han llamado desde allí, ha tenido un accidente.
Te esperamos allí, ven pronto por
favor.
-
Cheondoong
¿Un… accidente? ¿Pero cómo? Si ella estaba ahí mismo… ¡Maldita sea! Si a
penas hace una hora estaban riendo… No era posible, pero de todos modos no
podía perder tiempo, ella estaba allí, lo esperaba, bueno, no, no lo esperaba,
pero no pensaba dejarla sola en el hospital. Paró a un taxi por la calle y
llegó al hospital lo más rápido posible, entró corriendo a la habitación y allí
estaban todos, sus hyungs, su mánager, Rain, un hombre occidental y una mujer
coreana que lo acompañaba… y Blanca… Blanca tumbada en la cama… Blanca rodeada
de tubos… que imagen más desoladora… G.O se quedó un tiempo sin reaccionar,
mirándola sólo a ella, hasta que Rain le tocó el hombro:
- G.O, este hombre es el padre de Blanca, Brando, y ella es su actual
mujer, Lee Shin Mi, han venido a estar con ella en estos momentos tan duros,
como todos nosotros – le aclaró su superior, a lo que G.O les hizo una pequeña
reverencia.
- ¿Qué ha pasado? – preguntó él.
- Ella se dio cuenta de que saliste mientras estaba lloviendo y salió
corriendo detrás de ti, entonces, según ha contado la gente que estaba por
allí, un coche la arrolló en un paso de peatones… - le aclaró Cheondoong con
cara triste, casi llorando, mientras Mir se apoyaba en su pecho y escondía la
cara en él para evitar que lo vieran llorar. Tanto SeungHo como Lee Joon
miraban hacia el suelo intentando contener las lágrimas.
Todo había sido por su culpa… si no hubiera salido de esa manera ahora
Blanca no se encontraría en esa situación. Pero ahora más que nunca iba a estar
con ella noche y día, a la mierda los ensayos.
Al cabo de varias horas por fin Blanca despertó, al abrir los ojos lo
primero que vio fue a seis ángeles, ¿Estaba en el cielo?, no, eran MBLAQ y
Rain, que estaban con ella, en sus peores momentos, como una verdadera familia.
Siguió mirando como pudo alrededor de la habitación, pero no, no estaban ni su
padre ni su madrastra, si es que habían venido, lo más seguro es que se
hubieran largando al cabo de media hora de hacer el papel… como siempre. Los
ojos se le empezaron a inundar de lágrimas, no podía creer que ni siquiera en
ese momento su padre no estuviera allí, simplemente, no podía. En cuanto se
puso a llorar todos se acercaron a ella pero dejaron que fuera Rain quien la
consolara primero y una vez todo se normalizó se pusieron a hablar con ella,
aunque G.O se mostraba reacio a ello, porque no dejaba de sentirse responsable
por lo que le había pasado a su estilista.
Llegó la noche, Rain tuvo que irse una hora antes, y Blanca, al ver que los
cinco estaban cansados y sentados como podían, les dijo que se podían ir a
casa, que ella iba a estar bien allí, pero los chicos no querían. Fue G.O quien
los hizo irse:
- Yo cuidaré de ella, me quedaré por la noche y ya está, iros y descansad,
no pasa nada – dijo él de forma cortante, pretendiendo esconder la obligación
que sentía para quedarse.
Ante las negativas de los otros miembros, tuvo que ponerse serio,
consiguiendo que al final se fueran después de despedirse de Blanca. Cuando
todos salieron, G.O y ella se quedaron solos en la habitación, con un silencio
muy cortante al principio.
- G.O… yo… lo siento… tu paraguas se rompió cuanto tuve el accidente… de
verdad que quería dártelo para que no te mojaras… pero lo siento- se disculpó
Blanca mientras G.O la miraba con ojos de asombro, no se podía creer que la
ardilla tonta estuviera disculpándose por esa tontería cuando había sufrido ese
grave accidente.
Él iba a meterse con ella para quitarle importancia a esas absurdas disculpas,
pero no pudo, no pudo hacerlo, verla así, llena de morados y magulladuras, lo
frenó a la hora de contestarle.
- Vamos, no te preocupes por el paraguas, lo importante es que te recuperes
– le contestó él mientras se giraba para que Blanca no viera su cara sonrojada-
ahora duerme y descansa.
Cuando ella se durmió G.O, encargándose de que Blanca no se despertara ni
notara su presencia, se sentó al lado de su cama para esperar mientras dormía.
No sabía por qué, pero sentía algo, algo que no permitía que pudiera dejarla
sola, sí, seguramente era el hecho de sentirse culpable por lo ocurrido, sólo
eso… ¿verdad? De repente notó como Blanca no paraba de moverse, revolviéndose
un poco, él no sabía qué hacer, así que su primera reacción fue cogerle la mano,
y así lo hizo, de tal manera que ella se calmó y él sintió también un profundo
confort. Pensaba quedarse con ella en el hospital los días y todas las noches
que hiciera falta, incluida esta noche.
G.O se iba quedando profundamente dormido, estaba bien allí, sin que nadie
le molestara, sólo con sus pensamientos, unos pensamientos últimamente
centrados en una persona, en Blanca, pero de todos modos no podía ser otra cosa
que cambio, sí, nada más, Blanca sólo podía estar tan presente en sus
pensamientos porque representaba un cambio en la vida de todos, nada más… o eso
intentaba creerse él.
Ains pobriña Blanca, menos mal que ha conocido a Mblaq y papá Rain.
ResponderEliminarG.O., a ver, sabes perfectamente qué está pasando, no lo niegues.
Me encanta la foto del final ^^
¡Esperando el siguiente capítulo!